Es común ver, en los proyectos de construcción modernos, que se priorice el diseño de fachadas de cristal; para las cuales es necesario utilizar un vidrio de seguridad que garantice su resistencia a impactos, variaciones de calor y tensiones. Sin embargo ¿cuál es el mejor vidrio de seguridad para fachadas?
¿Cómo elegir el vidrio para fachadas?
Lo primero que debes saber es cuáles son las características que debe tener el vidrio para fachadas. Cuando se elige cristal para este uso, es necesario que tenga las siguientes características:
- Debe ser un cristal de seguridad; en ese sentido, podemos pensar en vidrios laminados, vidrios templados, e incluso mezclas de estos dos.
- Debe ofrecer aislación acústica; de esa manera se reduce el ruido que ingresa desde el exterior de la propiedad; se recomienda especialmente el vidrio termoacústico para fachadas que se ubiquen en avenidas concurridas.
- Debe ser un vidrio termorresistente; puesto que de esa forma se tiene un mejor control de la luz que ingresa desde el exterior, así como de la temperatura. En consecuencia, los ambientes interiores se sienten más confortables.
Cuando se elige vidrio para fachadas también es importante considerar aspectos como el espesor del cristal, el color del vidrio y el paso de luz que permitirá; así como el coeficiente de transmisión térmica.
Los tipos de vidrio más usados en fachadas
Ahora que conoces cómo elegir el mejor vidrio para fachadas, te presentamos los tipos de vidrio que más se emplean para este fin:
– Vidrio templado
El vidrio templado es uno de los favoritos debido a su resistencia térmica y mecánica. Sin embargo, es necesario que se considere su forma final antes de que ingresen al horno de templado.
– Vidrio laminado
Otra opción para usar en fachadas es el vidrio laminado, el cual presenta una película que ayuda a que los fragmentos del vidrio no se desprendan abruptamente si llegara a romperse.
Algunos tipos de tratamientos especiales para vidrios de fachadas
Los vidrios para fachadas también pueden tener tratamientos especiales que mejoren aún más sus propiedades. Por ejemplo, hay vidrios para fachadas autolimpiantes que ayudan a que la fachada tenga un mantenimiento más fácil. Asimismo, hay vidrios de baja emisividad y control solar; este es un vidrio aislante que contribuye con el ahorro de energía. Otro tratamiento que puede tener el vidrio es el aislamiento térmico, gracias al cual se garantiza un excelente confort en invierno como en verano.
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